miércoles, 21 de enero de 2015

El Positivismo no es estar positivo

El positivismo es una corriente filosófica que ama a las ciencias y solo será verdad lo que ellas digan. Dirá que el único conocimiento auténtico o válido es el conocimiento científico. Para ellos lo único real y existente es aquello que puede ser experimentado, medido y catalogado a través de un método científico (experiencia e inducción). Por lo tanto rechazarán toda noción a priori, todo concepto universal y absoluto o intuición directa de lo inteligible.

El hecho es la única realidad científica, por lo tanto también rechazaran fuertemente a la metafísica, ya que las proposiciones de la metafísica no pueden considerarse verdaderas porque su contenido no proviene de la experiencia. No hay nada más que los hechos.

Entre las corrientes positivistas encontramos: Positivismo ideológico, Empiriocriticismo, Positivismo metodológico o conceptual, Positivismo analítico, Positivismo sociológico, Positivismo realista y el Neopositivismo (empirismo lógico o neopositivismo lógico).

El máximo representante del positivismo será Auguste Comte.


1 comentario:

  1. El positivismo (o positivismo lógico), en el uso que se hace del término en Ciencias —que a mi modo de ver es el más útil—, viene a decir que dos afirmaciones o dos teorías son equivalentes si dan lugar a la misma percepción del universo, esto es, si dan lugar a las mismos efectos observacionales o medibles (en principio). Todo lo demás es establecer una relación determinada esa percepción y un conjunto de palabras hasta cierto punto arbitrario, es decir, una elección de gauge en términos matemáticos.

    Una consecuencia inmediata de lo anterior es que preguntas cuyas posibles respuestas dan lugar a la misma concepción del mundo (a los mismos efectos observacionales en principio) carecen de sentido. Esas preguntas son las diferentes elecciones de gauge del párrafo previo.

    El positivismo lógico surge en ciencia ante la necesidad de atribuir un significado al concepto de campo(electromagnético, en tiempos de Faraday) y se hace imprescindible con el desarrollo de la mecánica cuántica y, en particular, con la interpretación de Copenague.

    En paralelo, Mach establece la misma noción en filosofía que el completada por Russell, para que con posterioridad, Carnap reuniera y formalizara todo.

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